Cómo remover los estigmas de la salud mental en las empresas
Desde antes de la pandemia, en Mercer Marsh Beneficios ya veníamos conversando con varias empresas acerca de su preocupación en el incremento de varios sucesos relacionados con la salud mental de sus colaboradores. La baja productividad era una de las principales “señales” que los líderes reconocían, y que los hacía pensar que “algo” estaba pasando por la mente de su colaborador. Había llegado entonces el momento de actuar, para evitar alguna situación irremediable y dolorosa.
Una vez detectado el problema, dar el primer paso es lo más difícil para una organización que quiere comprometerse con cuidar y velar por la salud mental de sus empleados; sin embargo, es el más importante. Si su empresa ya tomó la decisión de estructurar un programa de salud mental inclusivo e integral, se hace necesario contar con data confiable que le permita tener una idea clara hacia dónde se deben dar los primeros pasos.
Según proyecciones de la Organización Mundial de la Salud, se estima que la depresión y la ansiedad serán las primeras causas de perdida de la capacidad laboral en los próximo 10 años. Si esto es así, ya todas las empresas deberían tener claro las rutas a seguir en los próximos 10 años para mitigar el impacto que estos rankings nos están alertando.
De acuerdo a la última encuesta de tendencias medicas globales de Mercer Marsh Beneficios, los problemas emocionales son el tercer factor de riesgo que afecta los costos médicos que influyen en los programas de salud.
Ante estas dos premisas, las organizaciones deben empezar por afrontar el primer reto que tienen por delante antes de embarcarse en el viaje de implementar un programa de salud mental. Y este primer reto es el estigma social que se impone a quienes estén pasando por las dolencias derivadas de la salud mental. En la medida que hablar de salud mental no sea un tabú o un misterio, más rápido y fluido será el avance en la creación de modelos de programas exitosos de bienestar integral, físico y mental.
Cuando se les preguntó a los participantes de nuestra encuesta, en su mayoría líderes de recursos humanos, si habían desarrollado programas que ayuden a reducir o eliminar el estigma en relación con la salud mental de sus empleados, el 29% respondió que sí, en alguna manera, y el 71% que no, en ninguna manera.
¿Y cuáles podrían ser esas actividades o programas que ayudarían enormemente a una organización a ir rompiendo la barrera del estigma ante los temas de salud mental? Aquí les menciono algunos ejemplos:
Incentivar charlas y conversatorios sobre asuntos de salud mental para ir trabajando en la educación de toda la organización.
- Políticas de diversidad e inclusión
- Comunicados específicos sobre salud mental
- Coaching para líderes en remoción de estigmas.
- Líderes o gestores de salud mental
- Soluciones digitales de salud mental (Líneas de ayuda)
- Testimoniales de empleados.
En países donde hay especial atención en los capítulos de riesgos psicosociales de sus regulaciones de salud, se ha notado que hay más actividades encaminadas a trabajar la remoción del estigma de la salud mental, como es el caso de Colombia. En el resto de los países de la región que participaron en esta encuesta, son aún muy incipientes los resultados de estas estrategias.
La pandemia ha venido a acelerarnos el ritmo de lo que ya se veía venir en temas de salud mental. No es ningún secreto el incremento notorio que han tenido en los últimos meses la participación de empleados en las líneas telefónicas de apoyo emocional.
Es importante entender que la intervención de la salud mental requiere del desarrollo de programas integrales, apoyados por líderes que atiendan el ciclo completo de prevención, diagnóstico temprano, implementación de programas, cultura organizacional, coberturas competitivas en beneficios, así como los programas de retorno laboral y calificación de incapacidad.
Si desea saber cómo en MMB estamos ayudando a organizaciones a diseñar e implementar su estrategia de salud mental, no dude en contactarnos.
