Control de costos del plan de salud y beneficios para empleados
El dilema del costo para el empleador
Los planes de salud y bienestar han adquirido una importancia estratégica cada vez mayor, tanto desde una perspectiva del deber y del cuidado, como por la capacidad que tienen de mejorar la reputación corporativa y la productividad en el lugar de trabajo, así como la atracción y fidelización de los empleados.
Mientras tanto, la variedad y la sofisticación de los productos ha crecido, ahora las empresas no solo ofrecen beneficios asegurables, sino una amplia gama de iniciativas de bienestar físico, mental, social y financiero, incluso ahora, cuando los costos de los planes de beneficios están en alza. De hecho, en promedio, los costos médicos superan la inflación general por casi tres veces.
La pandemia del COVID-19 ha intensificado la necesidad de las empresas de mejorar eficiencias y contener los costos. Los confinamientos, la interrupción del negocio y la desaceleración económica, han puesto las finanzas de las empresas bajo una gran presión.
Balanceando costos y empatía
Sin embargo, los empleados son particularmente sensibles a los cambios en los niveles de entrega de sus beneficios; y muchos esperan que los empleadores den acceso a atención médica especializada y de calidad. Por eso, los empleadores deben tomar medidas rápidas para modernizar sus beneficios y optimizar el valor de sus planes, a fin de asegurarse de ofrecer programas que sean costo-efectivos y que además protejan la salud de sus empleados.
Entonces, ¿cómo pueden los empleadores balancear la economía y la empatía, para ofrecer un programa de salud que sea significativo para sus empleados y que a su vez también sea costo-efectivo en el futuro?
Creación de una estrategia de contención de costos
Mediante el desarrollo proactivo de una estrategia de contención de costos, para las empresas será mucho más fácil tomar las decisiones necesarias, a fin de garantizar la sostenibilidad financiera de sus planes de salud y beneficios.
La gestión proactiva debe abarcar tres estrategias para mantener los costos bajo control:
Para aplanar la curva, las compañías necesitan estrategias de múltiples enfoques y de varios años, que aborden estos tres aspectos de manera simultánea.
Los empleadores que acepten este desafío, deberán crear programas de beneficios costo-efectivos que impacten positivamente a sus empleados. Aquellos que no lo hagan así, solamente lograrán el control de los costos a corto plazo.